En esta ultima entrada iré pasando por
cada uno de los temas que hemos dado en clase y de los cuales hemos tenido que
hacer su correspondiente actividad, contando ideas clave de cada tema y que es
lo que me han aportado para mi futuro.
TEMA 1.
LITERATURA INFANTIL.
En
este primer tema nos centraremos más en la diferencia entre literatura y
paraliteratura. La verdad es que antes de leerme este tema, si me llegan a
decir que las dos cosas son los mismo me lo hubiera creído, bueno me hubiera creído
cualquier cosa que me dijeran, pues es cierto que no tenia ni la menor idea de
lo que me estaban hablando. Una vez que me leí el tema, y la profesora lo
explico más en clase, ya vi claramente la diferencia entre ambos términos. Sin embargo,
también hablare de los diferentes textos como el teatro, la poesía de autor o
los cuentos de autor.
Por
una parte, tenemos la Literatura que es un arte que utiliza las palabras para
manifestarse, es decir, arte creado con palabras. Su objetivo primordial, es la
creación de un objeto artístico que llamamos obra, libro, texto, etc. La literatura,
como arte, no está creada para enseñar, ni para inculcar pensamientos o
valores.
El
maestro puede utilizar los textos literarios para incidir en el desarrollo del
niño en todos los niveles afectivos y de conocimiento propuestos en la etapa. La
Literatura Infantil ayuda al niño a aumentar su marco de referencia. Lo hace
creando otros mundos, forjando hechos que la imaginación infantil concibe como
vivencias posibles y personajes con los que compartir la anécdota.
Para
que un texto sea considerado literario, ha de cumplir con las siguientes
características:
-
Su primer objetivo ha de ser el artístico.
-
La función lingüística predominante será la función poética y se
manifestará en el carácter simbólico del lenguaje, el uso especial de las
estructuras lingüísticas y la utilización de tropos y figuras literarias.
-
Debe pertenecer a uno de los tres géneros literarios: narrativa,
poesía y texto teatral.
-
Ha de ser un texto de ficción aun cuando esté inspirado en hechos
reales.
Por
otro lado, encontramos la paraliteratura, tal y como indica el prefijo
"para-", se sitúa "al lado de" la Literatura. Es decir,
los textos paraliterarios presentan casi todas las características de los
literarios, pero difieren en algunas de ellas de forma que no pueden
considerarse, propiamente, Literatura. Existen grandes obras paraliterarias de
enorme valor. Pero sus usos didácticos han de ser diferentes. Es decir, el
objetivo que persigue la paraliteratura es moralizante, didáctico…
Los
textos teatrales que apenas son un tres o un cinco por ciento de la producción
literaria infantil. De hecho, no existen libros teatrales para ser vistos y/o
leídos para niños de menos de 8 años.
Para
hacer teatro en clase es necesario, en primer lugar, que el profesor se atreva
a superar sus temores y sus complejos con respecto a un arte que se considera
propiedad de los profesionales. También ha de armarse de paciencia y no
dejarse desanimar por las dificultades propias de las condiciones de la
enseñanza. Además, los niños se toman el teatro con tanta seriedad como
cualquier adulto, viven el momento del estreno como nosotros.
El
teatro trata de ser una interesante actividad cooperativa. Que permite a los
niños: hablar y mejorar su lenguaje, ejercitarse en la expresión escrita, situar
espacial y temporalmente el tema tratado, poner en práctica ciertos medios de
expresión artística, familiarizarse con el lenguaje no verbal, desarrollar la
psicomotricidad y la educación física.
Es
cierto que un niño de Infantil no tiene necesidad del teatro para hacer todo
esto; pero la actuación dramática le permite afrontar todas estas actividades
bajo un aspecto quizás más motivador y más coherente.
Aunque
es complicado hacer teatro con niños e inventarse una obra que pueda ser
representada por toda la clase, pero los niños tienen mucha imaginación y ellos
mismo pueden ser los que creen esa obra de teatro que luego vayan a
representar, además de cualquier tema se puede hacer una obra teatral como
hemos visto antes hacer este tipo de actividad es muy beneficiosa para los
niños. Así que no es obligatorio que solo se tenga que hacer una representación
teatral para navidad o fin de curso, podemos hacer una representación teatral
al finalizar un proyecto, de este modo mientras los niños van aprendiendo cosas
nuevas durante el proyecto cuando este finalice podrán representarlas en la
obra que han creado y así esos conceptos serán mejor asimilados.
La
poesía, al igual que otros géneros literarios está al alcance del niño, sin
embargo, no tiene apenas proyección en el aula. La poesía debe presentarse a
los niños como un juego artístico. Hay que permitir que su propia
imaginación creadora interprete y recree lo que lee e invente nuevas formas.
Así desarrollaremos su individualidad, el cultivo de su vena sensible y su
formación estética.
Si el niño, ya desde el
balbuceo, muestra gusto por los juegos vocálicos, los ritmos o las invenciones
léxicas, hemos de proporcionarle, como maestros, la posibilidad de continuar
su gusto por el disfrute creativo fomentando su vena sensitiva y su
imaginación poética.
Para
introducir la poesía en el aula lo que hizo Mª Carmen Diez Navarro, fue crear
un par de versos cortos que rimaran con el nombre del niño, cada día le tocaba
a un niño distinto. Pues asi de esta forma tan sencilla y simple fue como una
maestra dio a conocer la poesía en su aula de infantil, esto mismo se podría hacer
en las aulas, por ejemplo, con una palabra que diga un niño un día, al día
siguiente otro y así, de esta manera los niños van a estar esperando ese
momento del día en el cual llega la poesía que has creado. Esta es una muy
buena forma de acercar la poesía a los más pequeños.
Gracias a la primera actividad que
tuvimos que realizar del primer blog pude trabajar los cuentos de autor y su
análisis. Realizar esta actividad me sirvió para saber valorar como deberían
ser los libros que colocaría en la biblioteca de mi futura aula.
Ofrecer un libro para su
lectura ha de ser un regalo. Y un regalo, un buen regalo, debe estar
seleccionado y elegido concienzudamente para el receptor o para los receptores.
Hay varios libros de los que
nuestra profesora ha comentado en clase que indudablemente van a estar en mi
aula, como, adivina cuanto te quiero, te quiero casi siempre, ¿a que sabe la
luna?…
TEMA 2. TEXTOS
FOLCLÓRICOS.
La tradición cultural o
folclore, hace referencia a diferentes aspectos de la cultura popular; no
obstante, aquí nos centraremos en aquellos que tienen una estrecha relación
con la literatura: canciones, retahílas, leyendas, romances, fábulas,
trabalenguas, cuentos maravillosos... y, en concreto, aquellos más apropiados
para los alumnos de Educación Infantil.
Tres características
fundamentales del folclore son: el anonimato, ya que un texto tiene tantos
autores como personas lo han narrado a lo largo de los siglos hasta el momento
en que alguien lo fijó a través de la escritura, la oralidad, debida a la
transmisión vertical, pero sobre todo a la transmisión horizontal y a la
adaptación de los textos a las culturas que los acogieron.
Este tipo de literatura
conserve su oralidad, incluso cuando trabajamos en el último ciclo, y se
reserven otro tipo de textos más modernos y de transmisión escrita para
acercar al niño a los libros. Una regla imprescindible para el maestro: los
textos folclóricos son para contar y cantar; los textos de autor, para leer.
Mitos, leyendas, fábulas y
cuentos son los principales tipos de textos de transmisión oral en prosa. El
término más genérico para denominarlos es el de “cuento”
El cuento folclórico, relato breve de asunto ficticio y carácter lúdico surgido de la
tradición oral.
El mito, relato tradicional que cuenta la actuación memorable de dioses o
héroes en tiempos prestigiosos y lejanos.
La leyenda, forma simple de transmisión oral que refleja una tradición local.
Las leyendas urbanas son la evolución ciudadana y actual de estos textos.
La fábula forma breve con sentido moral e intelectual, protagonizada por
animales que reflejan actitudes y pasiones humanas. Su intención es
moralizante (y por lo tanto debemos considerarlas textos paraliterarios) y
concluye siempre con una moraleja explícita.
La enseñanza moral puede
encontrarse en diversos lugares de la historia y cada cual puede aplicarla a su
realidad a partir de su propio esquema de valores y de sus inferencias
particulares.
Este tema fue uno de los que más cosas pude
descubrir, pues no conocía las verdaderas historias de los típicos cuentos
infantiles, como las historias de los Hermanos Grimm. Además, pienso que
utilizar el folclore en el aula es fundamental tanto para introducir a los
niños en el uso de la palabra, además de despertar
su ingenio e imaginación, y también para que este tipo de textos no
se pierdan en el tiempo ya que son transmitidos de forma oral.
Normalmente los textos folclóricos están muy
presentes en la vida de la mayoría de los niños, ya sea
a través de canciones populares u otro tipo de textos, así que los niños pueden participar enseñando
al resto de la clase sus canciones populares.
TEMA 3. LA HORA DEL CUENTO.
A los más chiquitos les encanta que les
cuenten cuentos. Sin embargo, no ha de caerse en el error de suponer que la narración
tiene como únicos destinatarios a los prelectores, por el solo hecho que ellos
no saben aun leer. No es una técnica exclusivamente limitada a la escuela
infantil. Por el contrario. Correctamente llevada a cabo, la narración es, por
lo general, una cautivante experiencia para todas las edades.
Los relatos, trasmitidos oralmente, se fueron
puliendo, se expurgaron las palabras superfluas, adquiriendo la perfecta
redondez de un canto rodado.
El estado de ánimo, el eco que se encuentra en
el auditorio, lo imponderable, lo imprevisto, se encargarán de otorgarle un
matiz diferente. Este viejo arte del cuentacuentos sigue siendo, aún hoy en la
era tecnológica por excelencia, el medio más directo para aproximar al niño
a la obra literaria. La narración enriquece la imaginación de los niños.
Bajo la magia de la palabra construyen en sus mentes la escena descrita y la
ven con los ojos de la imaginación.
La técnica de la narración con libro es muy
parecida al cuentacuentos, porque en realidad no se lee, sino que se cuenta,
pero con el apoyo de las imágenes. El narrador va recreando la historia a
través de las ilustraciones que muestra a los niños y va asegurándose de que
se fijan en los detalles, en los gestos, en los movimientos...
Normalmente los maestros utilizan para esta
técnica libros grandes con ilustraciones llamativas y de un tamaño suficiente
como para que puedan verlas todos los niños.
Los niños adoran los cuentos. La hora del
cuento es, para ellos una hora mágica y los libros que los mayores tienen en
sus manos y les enseñan, un misterio. Las letras les atraen, desean
apropiárselas, descifrarlas. Cuando un adulto lee un libro, es como un mago
que conociera un código secreto que le permite adentrarse en un mundo desconocido
lleno de personajes y de historias. Los niños desean conocer también ese
código secreto para acceder a los mundos maravillosos que se esconden detrás
de las letras. Ellos mismos "leen" siguiendo con el dedo las líneas
y recitando el cuento con su memoria. Así́ empieza el deseo lector. Las
palabras, para el niño, están vivas porque nombran la realidad, porque da
nombre a objetos y sentimientos; a través de ellas se establecen analogías,
se realizan deducciones, se extiende, se precisa, se restringe, se corrige el
significado. Es fundamental que el niño escuche y entienda los cuentos que se
les leen y que comparta con otros niños esa sensación de emoción,
expectación, silencio y comprensión. El niño que escucha, lee la significación
de la narración en la entonación, en el ritmo, en el gesto, en los
movimientos corporales... Aprender a escuchar, a leer signos que comunican,
ayuda al niño en la posterior comprensión de la palabra escrita.
Para leer una historia a los niños de infantil
hay que tener en cuenta muchos de los aspectos ya planteados en el
cuentacuentos: entonación, ritmo, volumen, expresividad, pausas,
interactuación... y además, hemos de leer despacio, claro y vocalizando,
aunque sin resultar tediosos. No olvidemos que los niños solo cuentan con
nuestras palabras y con su imaginación para comprender, recrear y disfrutar la
historia.
En esta actividad tenia que hacer el
cuentacuentos, la verdad que la elección del cuento que yo hice no era la
apropiado ya que era demasiado largo como me dijo Irune. Sin embargo, creo que
fue una muy buena actividad ya que nuestros compañeros nos podían ayudar a
mejorar, de esta forma la próxima vez que hagamos la hora del cuento en la escuela
tendremos en cuenta cuales son nuestros puntos fuertes y los que no lo son
tanto.
TEMA 4. CREACIÓN LITERARIA CON Y PARA LOS NIÑOS
DE INFANTIL.
Existe
una amplísima oferta editorial de literatura infantil para actualizar y
mantener un rincón de lectura completo y variado, pero las inversiones
económicas para libros que se hacen en los centros no suelen corresponderse
con las necesidades del aula: pocos ejemplares, estropeados, anticuados,
estereotipados... Esta, desgraciadamente, es la realidad de muchos colegios y
muchas escuelas infantiles.
Cuando
el maestro crea textos con los niños, se convierte en el mediador de la
actividad y participa solamente encauzándola, fomentando la creatividad y la
fantasía, coordinando los turnos de palabra y elaborando la redacción
definitiva que leerá para que los verdaderos autores den su “visto bueno” al
resultado.
La
creación, en estos primeros niveles, debe ser colectiva y oral, permitiendo
que, espontáneamente, vayan surgiendo las aportaciones a partir de preguntas
realizadas por el mediador.
La
prosa (narrativa) es el género más similar al uso lingüístico ordinario y
la forma más natural de crear literatura en la actualidad. Cualquier niño de
Infantil ha inventado historias y cuentos libremente y se sentirá cómodo
trabajando con ella.
Las
estrategias para la creación en verso, están secuenciadas: se empieza por
simples juegos poéticos para familiarizarse con la creación en verso y para
ejercitarse con las figuras literarias, y se llega a la creación guiada de
poemas y, finalmente, a la creación autónoma.
La
dramatización es un recurso fundamental y inexcusable que desarrolla una gran
cantidad de capacidades en el niño. Pero a veces nos resulta difícil
encontrar textos que puedan ser representados por los niños de nuestra clase
(bien por el número de personajes, bien por la dificultad de algunos
papeles...) En este caso, lo mejor es crear obritas personalizadas para el
grupo. En unas ocasiones lo hará el maestro; en otros, la trabajarán los
niños.
Bueno
la verdad que esta actividad fue un poco mezcla de sentimientos, porque en un
principio pensé bueno crear textos para niño, vale bien, y cuando me puse ha
hacerlo fue como, pero en que estaba pensado, fácil esto no puede ser, no sabia
como empezar los textos, eso fue lo más complicado que tuve que hacer en esa
actividad. Y luego la parte de crear el cuento fue como guay esto si que me
gusta, la verdad que lo disfruté muchísimo. Además, creo que hacer este tipo de
actividades en el aula, a los niños les puede gustar mucho, porque no es
simplemente ese cuento que les encanta a los niños, sino que es el cuento “de”
los niños, porque son ellos los que han creado el cuento.
TEMA 5. BIBLIOTECA DE AULA.
La
biblioteca es un elemento indispensable e insustituible en el marco general del
proceso enseñanza-aprendizaje. Su utilidad como recurso para la ampliación de
la actividad docente y para el refuerzo de una auténtica educación integral,
justifica su creación en las escuelas y los esfuerzos por cuidar su
organización y su funcionamiento. Pero lo que da todo su sentido a la
biblioteca de aula es la potenciación de actividades libres o motivadoras como
un elemento más en la programación de tareas educativas.
Tratar
de formar pequeños lectores, mejor dicho, ratoncitos de biblioteca, sin
involucrarse de manera afectiva, no funciona. Sin unos brazos que acaricien,
sin unas nanas que adormezcan, sin unas palabras mágicas que curen, poco o
nada se logra.
Entregar
libros, así nada más, sin ton ni son, a los niños más chiquitos, suele
ocasionar únicamente destrucción, conflicto y alejamiento de los libros.
Solo
lo que se ama se cuida y se conserva. Y esto se hace evidente en la biblioteca
cuando llegan los niños por primera vez. Si sus universos no han sido nutridos
con libros y con afecto, los estantes serán desocupados de inmediato y los
libros servirán para cualquier cosa menos para “leer”. Serán pisoteados,
mordidos, mutilados... Los adultos gritarán, los niños llorarán y la
biblioteca se convertirá en el lugar menos apetecido por niños y adultos.
Si,
por el contrario, los niños han aprendido que los libros se leen rodeados por
brazos afectuosos, en medio de un ambiente cálido y reservado para un momento
de comunicación especial, la biblioteca será el lugar más visitado y mejor
cuidado.
El
espacio físico de la biblioteca debe ser agradable, amplio y luminoso. Se
encontrará acondicionado con almohadones, colchonetas y alfombras, así como con
mesas y sillas apropiadas para las edades de los chicos. Habrá quienes
querrán leer sentados sobre un cojín en un rincón; algunos buscarán su
acomodamiento sobre una alfombra y, tumbados, disfrutarán de las obras; otros
se dirigirán a las mesas y, sentados en bancos o sillas, realizarán su
lectura.
Una
biblioteca para los más pequeños debe permitir múltiples y muy distintas
actividades: mirar cuentos e imágenes, escuchar narraciones, escuchar cuentos,
ver obras de teatro, representar títeres, dibujar, ver cuentos y tebeos con
los padres, hermanos o abuelos, jugar a juegos de mesa, mirar libros y tebeos
con amigos, tumbarse tranquilo a mirar cuentos, buscar libros y llevarlos a
casa, conversar con los amigos sobre los descubrimientos realizados. El
ambiente se convierte así́ en fuente de riqueza.
Esta actividad final me ha gustado mucho
ya que la creación de esta biblioteca es muy útil para nuestro futuro como
maestras, además después de todo lo aprendido nos sirvió para darnos cuenta de
que las bibliotecas de las escuelas no son lo suficientemente correctas, así
que viendo los errores que normalmente hay en las bibliotecas de las escuelas
nosotras decidimos cambiarlo.
CONCLUSIÓN.
Realizar este último post me ha servido
para darme cuenta lo poco que sabia de literatura infantil y lo mucho que he
llegado a descubrir.
Aprender la diferencia entre literatura y
paraliteratura, me ha hecho darme cuenta de que en la mayoría de las escuelas
predomina la paraliteratura, aunque en esta asignatura he podido darme cuenta
de que hay gran cantidad de libros literarios que deberían estar en las
escuelas.
Por otro lado, introducir en la escuela
la poesía o el teatro es algo que se debería hacer con frecuencia y fluidez, no
como algo obligatorio o planificado, es decir que no llegue tal día y se haga
un poema porque lo pone en el horario. Además, conservar los textos folclóricos
es importante no solo para los niños sino para la propia cultura.
Descubrir todo lo que he aprendido con
esta asignatura, me hace pensar que la biblioteca que vaya a tener en mi aula
va a estar llena de libros literarios, creaciones propias tanto de los niños
como las que yo pueda hacer y libros paraliterarios.
BIBLIOGRAFÍA.
Labajo, I (2018).
Apuntes de literatura infantil.